¡Buenas noticias! Normalmente, el impuesto es del 19%, pero tiene derecho a una desgravación fiscal si ha vivido en su propiedad durante tres años o más y puede demostrar que es su residencia principal. ¿Qué significa eso? Si compra otra propiedad en los dos años siguientes a la venta, obtendrá una desgravación basada en el importe reinvertido. Podemos calcular cuál será este alivio.
Sólo pagará impuestos en función del beneficio que obtenga, por lo que si su nueva propiedad se compra por un precio superior al de la que vendió, no deberá pagar ningún impuesto sobre la ganancia patrimonial.
También puede compensar los gastos relacionados con ambas propiedades, la venta y la compra, por ejemplo, los gastos de notario y abogado. Si ha realizado ampliaciones en el inmueble vendido y dispone de facturas, también puede compensar esos gastos.
Si tiene más de 65 años cuando venda su propiedad, no pagará ningún impuesto sobre las plusvalías.